2018 es un año clave para que la legislación española se adecúe a las exigencias normativas de la Unión Europea y en particular al nuevo Reglamento General de Protección de Datos (GDPR), que es de obligado complimiento desde el próximo 25 de mayo. Se trata de una normativa que tendrá un fuerte impacto en las empresas y administraciones públicas, pues obliga a una serie de novedades que abren un escenario radicalmente distinto a la hora de asegurar la protección de datos de sus clientes/ciudadanos.
Es más, la consultora Gartner afirma que más de la mitad de las organizaciones no están totalmente capacitadas para cumplir con los procedimientos y obligaciones de la nueva legislación. Esto se debe, en gran parte, a un amplio desconocimiento por parte de éstas acerca de los cambios que implica. La obligación de disponer de un delegado de protección de datos, derecho por parte de los usuarios a la portabilidad, la ampliación de los datos especialmente protegidos y de las medidas de seguridad, comunicar las violaciones, y el aumento de las sanciones, son algunas de las mutaciones de la LOPD.
Con el fin de profundizar sobre este nuevo panorama legislativo y los retos que abre a las empresas, así como sobre qué soluciones tecnológicas son las más adecuadas para garantizar una correcta protección de los datos personales en las organizaciones, CSO, publicación especializada en seguridad del grupo IDG Communications, ha organizado una mesa de debate para el próximo 5 de abril. En el encuentro, moderado por Alfonso Casas, coordinador editorial de CSO, expertos de compañías de la industria tecnológica y de empresas de diversos sectores productivos ofrecerán su visión y estrategia ante estos desafíos.
